La estrategia manda, Maranello se levanta
Quién iba a decirnos que las palabras de la entrevista a Lewis Hamilton sobre quienes eran los favoritos este año iban a ser ciertas. En efecto, los italianos han triunfado en Australia.
Hoy día 26 de marzo, ha dado comienzo el mundial de Fórmula 1 2017. La carrera se ha disputado en la ciudad de Melbourne, en el circuito de Albert Park, que lleva acogiendo la primera carrera del mundial desde hace ya unos cuantos años. AQUÍ os dejo un enlace de mi post anterior sobre el circuito.
Tras una gran cantidad de fallos mecánicos y errores cometidos por los pilotos en los entrenamientos y en la clasificación, la carrera se presentaba algo turbia debido a la gran cantidad de incidentes que suelen ocurrir en circuitos de esta índole y con semejantes peculiaridades en el trazado. Los Mercedes, claros favoritos para llevarse la carrera, colmaban la primera y tercera posición de parrilla con Lewis Hamilton y Valteri Bottas respectivamente. Entre ellos, un veterano Sebastian Vettel hizo acto de presencia y consiguió separarlos por apenas unas décimas en clasificación. Esta hazaña del piloto alemán había puesto en jaque a la escudería de Brackley y puesto algo nervisoso a ambos pilotos de la flecha plateada. Tras algunos problemas en la parrilla iniciados con una avería en el coche de Daniel Ricciardo que no parecía estar del todo arreglado tras la colisión en la Q3, viéndose obligado a partir un par de vueltas más tarde desde el pit line, y una salida abortada por el reporte de Nico Hulkenberg de una anormalidad en las posiciones de salida; Sebastian Vettel hizo una salida magistral no dejando que el tricampeón se le escapara como iba siendo habitual el año pasado y aprovechó un fallo en la estrategia de cambio de neumáticos del Mercedes, el cual perdió una enorme cantidad de tiempo al verse frenado por el tráfico (más específicamente Max Verstappen), para así llevarse la victoria de manera holgada.
Y he aquí el tema de la cuestión. ¿A Mercedes se le ha olvidado elaborar buenas estrategias? La actual campeona del mundo de constructores y su equipo de ingenieros en la era híbrida nunca se ha visto obligado a pelear contra otra escudería en igualdad de condiciones como ha sido el caso de hoy. A pesar de tener una leve ventaja mecánica con respecto a Ferrari, con este nuevo reglamento esa ínfima superioridad se queda reducida a nada si no se acompaña de una buena estrategia, hecho que ha quedado demostrado hoy tras ese fiasco de elección de neumáticos y la vuelta seleccionada para entrar en boxes. Toto Wolff y Niki Lauda impulsaron un proyecto de perfección absoluta basado en una superioridad aplastante sobre sus rivales de manera que no hiciera falta pelear de manera directa contra ellos y reduciendo su presencia en pista a una mera competición entre sus dos pilotos. Esto ha hecho que prescindieran de los ingenieros y en concreto del rey de la estrategia y uno de los mejores jefes de equipo que han existido, Ross Brawn, actual director deportivo de Liberty Media. Quieran o no, el actual Mercedes AMG no es otro que aquel Brawn GP que logró imponerse a la supremacía de las escuderías tradicionales cuya diferencias de presupuesto era de carácter exponencial, o aquella Mercedes GP de M.Schumacher y N.Rosberg que apenas llegaba a rozar los puntos en contadas ocasiones y que se vio obligada a enfrentarse cuerpo a cuerpo contra otras escuderías para sobrevivir. Con esto no digo que los ingenieros de Mercedes no sepan hacer estrategias de carreras, sino que tal vez deberían no ir tan de sobrados y llevar los deberes ya hechos de casa. El momento en el que S.Vettel separó a sus dos monoplazas la ansiedad ya iba siendo evidente en el equipo, y probablemente fue ese el motivo por el cual la estrategía (para nada acertada en ninguna circunstancia) falló estrepitosamente. Realmente, a pesar de ser muy mala la elección de las gomas y el momento de la parada, podría haber funcionado y L. Hamilton hubiera mantenido posición en el caso de que V. Bottas se hubiera colocado en segunda posición y hubiera ido frenando al grupo perseguidor como seguramente habían pensado. ¿Pero realmente tenían estrategias alternativas? Desgraciadamente no... La alternativa planteada, el denominado PLAN B, era ir a dos paradas y explotar el compuesto más duro y lento puesto alrededor de la vuelta 20, y con el que se podía llegar a final de carrera de manera bastante sobrada, para realizar un cambio por unas gomas más blandas en las últimas vueltas de carrera e intentar llegar a la cabeza. Esta estrategia significaría una pérdida de alrededor de los 50s-1min en boxes, lo que la hace una idea pésima y en mi opinión motivo de por lo menos una reprimenda y un par de collejas al que la pensó.
En definitiva, espectacular clase de conducción que ha impartido el cuatro veces campeón del mundo Sebastian Vettel y una alegría para todos los aficionados de esta categoría que vemos como se asoma un horizonte de competitividad y de cambios. Esperamos ver pronto a más equipos compitiendo por estar en la parte alta de la parrilla como Red Bull, McLaren o Williams.
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